jueves, 5 de mayo de 2016

Isekai no Seikishi Monogatari: dale alegría al quinceañero que llevás dentro

Acabo de terminar de ver esta serie de OVAs del 2009, y la verdad es que es divertido de ver. Es un digno sucesor de la serie padre Tenchi Muyo (dentro de la continuidad establecida por los OVAs Tenchi Muyo! Ryo-Ohki) con todos los elementos que caracterizan a una serie de la franquicia: comedia, un personaje masculino rodeado de chicas hermosas, un aire romántico/erótico, acción, mechas, naves espaciales y ciencia-ficción mezclada con fantasía.


La serie sigue las aventuras de Masaki Kenshi, un muchacho de 15 años que cae en medio de un conflicto de intereses en un mundo llamado Geminar. En este mundo la fuerza militar la determina el uso de mechas semi-orgánicos llamados Seikishi, cuyos pilotos (en su mayoría mujeres, con unos pocos y muy apreciados hombres) constituyen una especie de casta noble. En este mundo acaba de morir el rey de Shtrayu, y su hija Lashara, de 12 años, tiene muchos enemigos que no desean que efectivice su reinado. La presencia inesperada de Kenshi y sus particulares habilidades serán determinantes en la guerra que está a punto de estallar.


No, no es una serie para el público filosófico. No ofrece ningún desafío para el intelecto y tampoco lo intenta, uno intuye el final desde el primer episodio (es más, uno se da cuenta del rol de cada personaje en el momento en que lo presentan). No hay mayores explicaciones acerca de lo que está pasando, simplemente uno acepta que es así. Incluso hay giros argumentales que, si resultan inesperados, es porque no tienen demasiada lógica y uno queda parpadeando y preguntándose en qué pensaba el guionista. Pero eventualmente uno se acostumbra, y para el 2° capítulo a uno ya no le importa, porque no es uno quien lo mira, es el quinceañero que tiene dentro: mechas, naves que son mas bien islas flotantes (a la Laputa), chicas bien dotadas en paños menores o en trajes apretados, luchas entre mechas y naves y espadas y rayos y centellas. Cuando termines la serie tu quinceañero interior estará tan vivificado que te vas a preguntar si te levantas temprano para ir a trabajar o para ir al liceo.


Y lo digo a pesar de que para la fecha de su emisión, y teniendo en cuenta que se distribuyó como OVA, no estamos ante el animé mas picante de su momento ni mucho menos. Si, hay un fan-service casi constante que permea todos los capítulos, y sí hay alguna que otra escena un tanto subidita de tono, pero no son nada en comparación con lo que han mostrado otras series contemporáneas de esta.
La animación es buena pero no es de las mejores. Un diseño de personajes agradable pero no sublime. Diseños mecánicos buenos, pero no demasiado innovadores. La música es adecuada pero no deslumbra. Las escenas de acción son divertidas y bien pensadas pero no son impactantes.En definitiva se puede decir que es un animé que promedia en todo y no tiene más propósito que el divertirnos un rato, un propósito que cumple, suponiendo que no nos hayamos levantado demasiado exigentes.


No es un animé inmirable, para nada, es divertido de ver y tiene momentos que son verdaderamente disfrutables (algunas secuencias de artes marciales son muy bien logradas). No aporta nada nuevo, pero tampoco se lo proponía al inicio de todo, así que no miente. Consigue incluso, dejarle a uno la espina acerca de qué sucede luego, espina que acaso se retire este año con la aparición de una nueva serie de OVAs dentro de la misma continuidad a mediados de este año.